FARRONDÓN
Un farrondón es un ‘desconchón en la pared por caída de un trozo del enlucido o revestimiento exterior’. En Mérida y sus cercanías, Zamora Vicente encuentra efarrondón ‘desconchado en la pared’; el cual nos conduce al gallego-portugués esbarrondar ‘caerse a cacho, venirse abajo, desmoronarse’ con asimilación sb > f como en refalar ‘resbalar’ debido al ensordecimiento causado por la aspiración de la -s, de donde efarrondar y el aumentativo de efecto o resultado (e)farrondón. (En Puebla de la Reina, también farrondar ‘desconchar’ además de farrondón).
Palabra que hunde sus raíz en el barro ‘mezcla de tierra y agua’ (voz prerromana, quizá de origen celta según el DRAE) a través de su numerosa familia portuguesa: esbarronda, esbarrondamento ‘demoronamiento’ acción o efecto de esbarrondar, por citar los parientes más cercanos de la palabra que nos ocupa. Ya a este lado de la raya, Rodríguez Perera localiza barrumbar: «Se barrumbó la pared y le entalló una pierna».
Este verbo con el significado de ‘desprenderse, caerse, derrumbarse’ reaparece en numerosas zonas del ambito gallego y leonés bajo diversas variantes como esbarrumbar, esbarrundiar ‘caerse una pared o perte de ella’ (Galicia y zonas aledañas de Asturias y León), esbarrundar, esbarrungar, esgarrumbar ‘derrumbar’ (Salamanca), efarrumbar ‘id.’ (Alburquerque) y farrondar. En algunas se advierte el influjo de derrumbar (antes derrubar ‘echar por tierra, derribar’ aún vigente en la lengua hermana) que entronca con el latín vulgar derupare ‘despeñar’ derivado de rupes ‘peña, risco, precipicio’; por otra parte de significado tan fronterizo.
En otros pueblos de la Baja Extremadura se emplea este farrondón (Almendralejo, Campillo de Llerena, Valencia del Ventoso, Cabeza del Buey…) y variantes como farrumbón (Burguillos del Cerro) o farroncón (Fuente del Maestre).